sábado, 14 de marzo de 2009

Don't beg for attention. Just be entertaining

kiddos
Dios mío, piensa, esos ojos nunca se han detenido un segundo. Abrasan el alma. Me agotan; me siento seca, deslizo por la pared uno de mis rizos, y mantengo firme una voluntad que no me pertenece. Su boca sonríe a destiempo, nadie observa y se permite un gesto que borra en instantes. Un gesto que intenta atraparme. Un gesto que hace tiempo habría hecho girar mis pies en una danza poco grácil pero sincera, y que ahora no recorre el vacío que queda entre nosotras. Ya no es mi dueña, lo sabe, y la furia asoma entre el hielo. Pronto cambia de manos, y dedica su juego a otros espectadores. Son otras vidas, indiferentes, que resplandecen cuando se acarician. Más recuerdos que algún día enterraremos. "No voy a abandonarte", es lo que susurra a los desconocidos. Ilumina el aire a su alrededor, y vuelve a mí una vez más, sabiendo que no me ha perdido, que nunca me tuvo, y que no existe la melancolía. Y mis ojos se reflejan en los suyos. Se vuelven azules.

2 comentarios:

An dijo...

interesante, me da que no lo e eentendido muy bien, pero me gustaa,saúdos e apertas

Barb dijo...

un dia que tengas tiempo te lo explico ;)